
Cuidar la higiene bucal es extremadamente importante para mantener una buena salud dental. Para lograrlo, existen una gran cantidad de complementos, que junto al cepillo de dientes convencional, pueden ayudarte a acabar con todas las bacterias y restos de alimentos presentes en tu boca.
Uno de esos complementos es el irrigador dental. Se trata de una herramienta que está especialmente indicada para aquellas personas que se han colocado una ortodoncia fija o implante dental.
¿Qué es un irrigador dental?
Se trata de un instrumento que nos ayudará a acabar con todas las bacterias que tras el cepillado se han quedado en nuestros dientes o encías, o de aquellos lugares a los que el cepillo no puede acceder. Su funcionamiento se basa en un chorro de agua a presión con el que se limpiarán los dientes.
Es una herramienta muy útil para llegar a zonas como las bolsas periodontales. Es importante destacar, que esta herramienta no sustituye la necesidad de realizar revisiones con el dentista como mínimo una vez al año, ya que con su uso lo único que lograrás es la limpieza de tus dientes pero no podrás detectar las posibles enfermedades o problemas dentales presentes, y por lo tanto llevar a cabo su tratamiento.
¿Cuándo se debe utilizar el irrigador dental?
Si tienes esta herramienta en tu casa, se recomienda usarla una vez que te has cepillado los dientes y usado el hilo dental. Aunque pueda parecer pesado hacer esto tras cada comida, con el paso del tiempo notarás como tu salud dental mejora.
Con los avances de la tecnología, la odontología no se iba a quedar atrás. Se ha creado un nuevo irrigador dental inalámbrico con el que será posible eliminar hasta el 99% de la placa y sarro dental.
Beneficios de usar un irrigador dental
Usar este complemento en tu rutina de higiene bucal, presenta una gran cantidad de ventajas, entre las que destacamos las siguientes:
- Sencillo de usar : Este complemento viene acompañado de unas instrucciones en las que se indica claramente cómo se debe usar. Gracias a ellas lograrás incorporar esta rutina en tus hábitos diarios facilmente
- Ayuda a prevenir inflamaciones: Al acabar con las bacterias que se van acumulando en los dientes y encías, podemos prevenir la aparición de enfermedades como la periodontitis ,y con evitar inflamaciones.
- Eliminar la placa dental : La principal función de este sistema es eliminar la placa acumulada en las piezas dentales. Esto ayudará a que no aparezcan enfermedades como caries o sarro.
- Buen aliento: al mejorar la limpieza de la boca, se conseguirá evitar problemas como la halitosis, ya que las bacterias que la provocan se habrán eliminado.
¿Cómo se utiliza?
Como ya se ha recomendado anteriormente, esta herramienta debe usarse tras el cepillado dental, esperando siempre al menos un par de horas entre cada uso, ya que de lo contrario, podríamos llegar a provocar daños. El tiempo máximo para usarlo es de cinco minutos.
Las partes que conforman un irrigador dental son: Depósito de agua, Bomba y boquilla.
Para utilizarlo, debes rellenar el depósito con agua (también es posible incluir enjuague bucal, aunque es preferible consultarlo antes con tu dentista).
Para cada zona de la boca, se deberá utilizar una boquilla diferente. Generalmente en las instrucciones, podrás conocer para qué zona es cada una. Para que el resultado sea mejor, se recomienda comenzar desde los últimos molares hasta el centro de la boca, centrando esfuerzos en las zonas interdentales.
Si has decidido comenzar a usar esta herramienta, no dudes en ponerte en contacto con nosotros para resolverte todas tus dudas. En Clínica Dental Barrau contamos con un maravilloso grupo de expertos que se encargarán de ofrecerte los mejores servicios.

Dr. Antonio Barrau Martínez con número de colegiado 10000836 es experto en implantología y ortodoncia. Cuenta con una gran experiencia y un equipo de grandes profesionales altamente cualificados y especializados en salud dental.